02 julio 2007

Médicos


Foto: El País

A los medios de comunicación les ha llamado mucho la atención que dos de los implicados en los desbaratados atentados de Londres fuesen médicos. Como si la formación asegurase la cordura. A mí lo que me asombra es que personas que han vivido durante años en una sociedad odien tanto lo que ésta simboliza que participen en un atentado de la magnitud del que estaba planeado. Es decir, que a pesar de convivir día a día con personas de las que sólo les separa la religión, no hayan sido capaces de empatizar con ellas. Hasta el punto de forjarse una máscara psicológica a prueba de cariño. A prueba de relaciones personales. Porque, mientras estudiaban, ¿nunca salieron a tomarse unas pintas con sus compañeros? ¿Nunca sintieron una punzada de angustia al saber que estaban preparando quizá la muerte de uno de esos estudiantes con los que compartían aula? En el hospital donde trabajaban, ¿no les resultaría absurdo salvar las vidas de los mismos que estaban tratando de matar? Debe ser difícil ser un fanático, obligado a prescindir de uno de los rasgos instintivos más característicos del hombre. La empatía.

28 Comments:

Mariano Zurdo said...

La empatía es un atributo caprichoso. Muchas personas no la tienen y otras la utilizan equivocadamente. Ellos por ejemplo. Tienen una empatía brutal y desfocalizada por sus "hermanos". Eso les hace ser capaces de fingir durante años, incluso de tomarse pintas para mejorar el disfraz aun en contra de su religión. Se preparan durante años para eso. Yo no lo entiendo, pero es que hago esfuerzos por no intentar entenderlo. No me da la gana de entenderlo.

Anónimo said...

La empatía es lo que me recomendaba mi madre en lenguaje llano: ponte en el lugar de los demás para poder entenderlos.
pero con éstos, me pasa como a Mariano, no me da la gana.Los fanatismo me ponen los pelos de punta. Cerrazón..eso es lo que tienen.

Anónimo said...

¡Ah¡ me gusta más el verde que el blanco, me relaja más.

Desesperada said...

sí, el verde mola. la putada de esta plantilla es que sólo se ve bien en pantalla grande o panorámica!

Pablo González said...

No creo que se pueda "patologizar" a esta gente. Viven al otro lado del mundo, no fisicamente, pero sí respecto a sus sentimientos, sus creencias, sus valores, etc. Desde los horrores del nazismo sabemos que la asunción de la cultura occidental no garantiza ninguna humanidad. Acaso no puede decirse lo mismo que de los musulmanes, de los ingleses, holandeses y americanos que viven en África, en Asia, etc.? No creo que los valores de "ama a tu prójimo" sean primordiales y ni siquiera que estén presentes en el mundo occidental en el que vivieron estos terroristas.

No los defiendo ni los justifico porque su lucha política me supera en todos los aspectos, pero por eso mismo no creo que la solución sea el "inhumanizarlos". Aunque sólo sea por lo humanos que nos sentimos al hacerlo.

banderas said...

... y luego dicen de los frikis. ¡¡¡Estos sí que son auténticos frikis!!!

Yo no tengo ni idea de técnicas de espionaje ni de esas cosas, pero en series de TV he visto más de una vez personajes aparentemente normales que habían sido adoctrinados en plena infancia para pasar por normales y, en un momento determinado y bajo una orden concreta, sacar el monstruo aberrante/robot teledirigido que habían creado. Supongo que algo de verdad puede haber en ello. Visto lo visto empiezo a creer que la realidad supera a la ficción "again and again"... es que no lo puedo entender de otro modo.

::mer:: said...

REspondiendo a otra entrada tuya... yo tambien prefiero ir sola a las rebajas!!! bueno y a comprar en general, tanto ropa como... lo que sea!
Pasear tranquilamente por el super, sin rumbo, relajada.. y lo mismo con la ropa, a mi bola, a mi ritmo y si no hay casi nadie mejor y, POR FAVOR, que no vengan a darme la brasa los dependientes que entonces me piro.

Encuanto a lo de hoy, me considero empática con cojones, pero, ostia, me falta el punto del fanático (estoy un poco trastornada, pero en otro sentido) aunque yo creo que a ellos esa situación no les supone ningún dilema moral ni mucho menos.
besotes!

estilografic.blog said...

El verdadero terror del terrorismo yo creo que está en eso, en que por mucho que le demos vueltas nunca entenderemos qué puede llegar a pensar y sentir esa gente.

Me gusta la combinación de colores, te ha quedado guapo.

Desesperada said...

mmm, pues yo sí creo que quien es capaz de abstraerse así de sus semejantes tiene un problema, sea un espía o un terrorista, lo siento, es que yo sería incapaz, por eso no lo comprendo!

Lucía said...

Yo tampoco comprendo a este tipo de gente ...

Entiendo que puedan llegar de sus paises con una doctrina y unas consignas, pero no cambian al llegar a un país occidental y convivir con sus habitantes.

Tienen que haberles atrofiado algo en el cerebro.

P.D : A mí me gustaba más la plantilla anterior, sobretodo la imagen de la cabecera.

Anónimo said...

Por narices algo debe fallar en el cerebro de esa gente, pero yo me centro en los que eran, o son, no sé, médicos.
Ser médico debe nacer muy dentro de uno, dedicarse a salvar vidas es algo para lo que no sirve cualquiera, por eso se me hace dificil entender, no que maten, que tambien, sinó que mientras esperan la orden para matar se dediquen a salvar.

mismilcosas said...

Las odias!!! Pues yo tengo desde hace una semana una camara Polaroid de segunda mano q por ser de las Spice -en sus tiempos- me la han regalao jejeje... yo las quiero un poco por eso jejeje

Muas

Anónimo said...

Les enseñan a aislarse y a ver lo negativo de la sociedad en que viven, y luego les prometen el paraíso a cambio de su inmolación. Cruel y perverso, típicamente hitleriano. Saludos.

Anónimo said...

No nos engañemos, si te educan desde que naces en el odio a, y si te educan entre bombas, invasiones y muerte, cuando eres mayor eres un monstruo. NO dejan de ser más victimas del terrorismo. Yo si logro empatizar con ellos, es atroz, pero también cuando se mueren de hambre, nos importa una mierda ¿no? Supongo que para Odiar, hay que saber, y a ellos si les han enseñado.

Bicos!

José Carlos: said...

Me uno al recuerdo del valor histórico de Amor Deus, un saludo

Elena said...

Has planteado una reflexión más que interesante, desesperada. Creo que la capacidad de empatía es algo que muchas personas no llegan a adquirir jamás. No es tan fácil ponerse en el lugar de otras personas. Yo lo veo diariamente en mis alumnos, incapaces de cambiar su perspectiva del mundo y verlo desde los ojos de otras personas. Es cierto que ellos son adolescentes, pero esa capacidad no se adquiere fácilmente. Hay que trabajar y educar para ello. Y el fanatismo es justamente lo contrario.

Saludos

ekilore said...

terroristas también son los terroristas domésticos que maltratan a sus mujeres. algunos seguro que incluso te ceden amablemente el asiento en el metro si te ven cargada... :S

Desesperada said...

eki, bienvenida!!!! y desde luego que tienes razón, aunque el tema del maltrato lo hemos tocado otras veces. simplemente, mi reflexión se centra en por qué alguna gente no adquiere esa capacidad de sentir empatía, y creo que en ambos casos es evidente que no la adquieren! por algo son todos terroristas!

en general, aunque con matices bien distintos, creo que a todos nos cuesta entender posturas tan fanáticas. es cierto que a esas personas las educan en el odio más atroz, pero también es cierto que después conviven durante años con los objetos de odio, y ni siquiera desarrollan un síndrome de estocolmo leve! es llamativo.

en fin, como siempre, gracias a todos, es un placer debatir con vosotros!

tootels said...

VERDE QUE TE QUIERO VERDEEEE.. BUEN CAMBIO, A MEJOR, PARA MI...
nunca mais

mismilcosas said...

No ,nos entendemos en español, ella lleva dos años por aquí y lo habla bien!! Es mas graciosa...

Muas

Jove Kovic said...

Mengele era médico, Karadzic era o es médico ( y un apreciable poeta, según dicen). Médicos eran los que participaban en las torturas, que los militares argentinos o chilenos, infligían a su pueblo durante los años más oscuros de la dictadura.
No creo que la condición de médico inmunice contra nada. Yo trabajo con médicos y puedo asegurarte que al menos un par de ellos no tendrían incoveniente en actuar como sus colegas americanos si se terciase la ocasión.
Como he dicho antes, a salvo de la psicopatía y/o el fanatismo no está ninguna profesión.

Marcos said...

Aquí, en occidente, tenemos la tonta costumbre de igualar persona con estudios a persona culta, buena y sociable.

En oriente, como no son gilipollas, utilizan nuestra idiotez para esconder a sus agentes 'dormidos' a quienes nada les interesa un bledo la religión, los sentimientos y las relaciones con esa gente con las cuales han convivido.

Habitualmente son personas a quienes les han lavado el cerebro de tal forma que todo eso que a tí te asombre para ellos simplemente no existe de cara a occidente. Tanto es su odio hacía nosotros, los infieles. Esta gente no tienen porque ser nativos, ni criados en sus respectivos países. Pueden ser emigrantes, inclusos de segunda, tercera... generación.

Recientemente leí un libro en el cual se explica bastante bien lo que en pocas palabras intento explicar: El Afgano de Frederick Forsyth.

Seguiremos pensando, como bien dices tú, que la formación asegura la cordura. Quizás podamos seguir durmiendo tranquilo con nuestra ignorancia.

Un beso, guapísima.

Desesperada said...

jove y marcos: completamente de acuerdo, por eso me sorprendió tanto que todos titulasen: "dos de los terroristas eran médicos". como si eso vacunase contra el fanatismo!

banderas said...

Eso es lo que yo quería decir... agentes dormidos... eso era lo que intentaba describir. Totalmente de acuerdo con Marcos en su enfoque del tema... y con Jove, para variar.

Bicos

Jano said...

Fríos como el hielo... cómo les enseñaran desde pequeños lo que tienen que hacer... y encima habiendo estudiado, habiendo conocido otras gentes de otras culturas, son capaces de no tener la inteligencia para saber qué está mejor y qué está peor.

Y por qué no utilizar esa fuerza para moldear mentes con una finalidad diametralmente opuesta... encima siendo médicos, qué trabajo les costaría.

Anónimo said...

Todos pensamos que nuestro mundo es el correcto y justo.Todos,unos y otros.Por eso cuando sentimos que nuestro grupo es sistemáticamente humillado sabemos hacia donde canalizar nuestros odios.No es difícil.Parece que las creencias religiosas son capaces de cohesionar suficientemente a un grupo como para crear una comunidad gigantesca que en lineas generales no ve con buenos ojos las actividades del otro grupo.Supongo que esos casos de ultraje sangrante,de prepotencia del primer mundo son muy mal vistos en general por la comunidad religiosa musulmana y tenidas por una afrenta directa hacia su cultura,como un ataque en primera persona.Y aparecen las personas que quieren cambiar ese estado de cosas.Aparecen los líderes,exhortando a la acción.Muchos comulgarán con la idea,pero sólo unos pocos se convertirán en terroristas(bajo nuestro punto de vista),vengadores dirían ellos.Los niños ya tienen nuevos ídolos que imitar.
Se sabe hoy,en contra de lo que se creía que más de la mitad de los terroristas de este tipo tienen estudios superiores o medios.

Anónimo said...

Pues te puedo dar una pista.
Mi hermana es médico y trabajó unos años en Inglaterra. Ese país tiene carencia de médicos porque la carrera allí es dificilísima y el ritmo de trabajo es surrealista, por lo que tienen muchísimos médicos extranjeros.
No he seguido la noticia, no sé si esos médicos estudiaron allí la carrera, porque es muy habitual que médicos de la India y de otros países de la antigua órbita colonial una vez terminada su carrera, se vayan unos años a trabajar a Inglaterra y luego vuelven a su país.
Pero el racismo que existe hacia ellos es muy grande. Aunque legalmente está prohibido que exista cualquier tipo de discriminación racial, existe un gran desprecio hacia el no anglosajón. Y eso que los médicos son allí profesionales admiradísimos, no como aquí.
Pero mi hermana mismo como española también notó ese racismo.
Pero vamos, también es la naturaleza humana, que día a día nos demuestra que, por desgracia, somos lo peor.

Kurtz said...

Debe ser difícil ser fanático... desde nuestro punto de vista, no desde el del fanático.
Y es cierto que la formación no asegura la cordura. Ahí están los terroristas del 11-S, muchos de los cuales habían estudiado ingenierías.