13 diciembre 2007

Expiación

No suelo contar nada demasiado personal en este blog. Pero hoy necesito desahogarme, porque me siento desolada. Hace un tiempo, quizá algunos lo recordéis, conté aquí que me habían despedido de uno de mis trabajos. La mayoría sabéis que soy periodista autónoma, normalmente trabajo directamente para empresas... pero ese trabajo era el único que conservaba en un medio de comunicación. Llevaba cuatro años trabajando sin contrato. Cuatro. Cobrando por un programa semanal 260 euros al mes. No lloréis, según el tipo que maneja ese medio, periodista es cualquiera y bastante es que nos paga. El día que me echó, después de cuatro años, me alargó una carta de despido. Sin explicaciones. Sin mirarme a los ojos. Con la poca clase que caracteriza a la gente que nació rica pero que es nueva rica, los ricos de segunda generación. En Vigo tenemos muchos de esos.

Tras el despido decidí denunciar al medio, ya que la relación laboral es evidente, y quiero que quede demostrada. Ello conlleva una indemnización por despido improcedente. Y, lo que es más importante, demostraría que las empresas no pueden hacer lo que les da la gana: tener a gente trabajando sin contrato, por ejemplo. Muchas veces me he preguntado qué hubiese pasado si hubiese tenido un accidente de coche yendo a hacer una entrevista.

En el acto de conciliación, la abogada de este señor le insistió en varias ocasiones para que aceptase nuestra ventajosísima oferta económica, pero él se negó. Me llamaba "colaboradora" cuando el funcionario decía "trabajadora". Como si los colaboradores no tuviésemos derechos. Como si las personas no tuviésemos derechos.

Finalmente iremos a juicio. Pero la mayor parte de mis compañeros me han dicho que no les llame como testigos. Que lo entienda. Que no quieren meterse en líos. ¿Líos? Imaginaos qué lío es contestar sí a esta pregunta: "¿Utilizaba Desesperada las instalaciones de este medio de comunicación de forma habitual?". Eso es lo único que les preguntaría mi abogada.

Esos compañeros cobran entre 500 y 600 euros. Cobrarían más en cualquier tienda, en cualquier bar, en cualquier oficina. Hace tiempo, un sindicalista catalán me explicó porqué la gente con sueldos bajos acepta cosas que el resto no aceptamos: "Cuando ves a un periodista del Tomate correr tras un famoso que le desprecia te dices que tú nunca harías eso. Y es cierto, no lo harías cobrando un sueldo decente. Pero cuando ganas 500 euros tú mismo acabas sintiendo que no vales nada y actuando en consecuencia".

No sé si es cierto. Sólo sé que a pesar de creer que tenía amigos en ese sitio, me he dado cuenta de que en esta puta mierda de mundo estamos siempre solos, al final.

55 Comments:

Belén said...

vaya deses, como lo siento!!!!

JO, la verdad es que somos muy cobardes cuando hay que dar la cara por alguien y sospechas que tu puesto de trabajo esta en juego...

Pero tu con la cabeza bien alta nena, la dignidad es algo que no se compra con pasta, por muy rico de segunda o tercera generación que se preste...

Besos y ánimo

Im-Pulso said...

Hola, ¡lo que te han hecho no tiene nombre! Mejor dicho, lo tiene... Los dos lo sabemos.
También sabes donde encontrarme, sólo tienes que descolgar el teléfono, si puedo ser útil no dudes ni un instante en llamarme. Para lo que sea.
Los 150 kilómetros de asfalto, cielos rasos, rías, pajaritos, postes, casas, árboles y gente que que median entre tu casa y la mía se recorren en apenas dos horas, las que tardaré en estar a tu lado si llamas.
Un abrazo muy fuerte.

Desesperada said...

ves? a mí me sorprende enormemente que la gente sienta miedo. yo me ofrezco siempre en esos casos. por eso me he quedado tan sorprendida. es que el tipo es un auténtico enfermo, de esos que amenaza a la gente... pero, aún así, no tiene sentido: a ese medio le quedan meses de vida. ¿a que ahora lo entiendes menos? se van a ir todos a la calle en breve!

Desesperada said...

félix, qué riquiño eres, de verdad! te lo agradezco muchísimo.

Mendiño said...

Los universitarios tenemos lo que nos merecemos.

Cualquier obrero de la construcción tiene mejores condiciones laborales que un "cuello blanco".

¿Para qué sindicarse? ¿Para qué defender nuestros derechos? Si nosotros tenemos un título. Si nosotros estamos cerca de los que mandan. Si nosotros no sudamos...

No queremos ser obreros. Pero es evidente que no somos empresarios. Somos basura. Abundante y devaluada basura.

Tenemos lo que nos merecemos.


Buenísima entrada, Deses. Has reflejado en unas pocas líneas el desolador futuro de toda una generación, la mejor preparada, que dicen.

Celebro tu decisión de presentar batalla.

Apertas!

Desesperada said...

gracias mendigo. yo pienso exactamente como tú, a veces me siento enormemente sola cuando hablo con otra gente, la gente normal, que dice que soy una utópica y que hay que aceptar que las cosas son así. NO son así, no tienen por qué ser así. Sólo diciendo no cambiaremos las cosas.

Mendiño said...

Es que tampoco hay mucho que hacer.

Uno sólo no gana nada, y se lleva todos los golpes.

Si uno no aguanta poner el culo en pompa cuando tu jefe tiene el día atravesado, pues ahí está la puerta. Ya habrá alguien más necesitado o con más tragaderas que ocupará rápidamente tu puesto.

Y lo hará bien, porque es la cosa, hay un montón de peña muy bien preparada deseando que le den una oportunidad. Somos prescindibles!

Según salimos de la facul, nos ponen la zanahoria: tú trabaja, de becario, gratis, lo que sea...ahora ganas poco, eres el pringao, pero ya verás como en un tiempo serás el jefe de los nuevos pringaos. Y te van subiendo el sueldo, y suben las horas de trabajo y bajan las de sueño.

Y cuando te quieres dar cuenta, te plantas en los cuarenta, con la parejita, tripón, entradas y una hipoteca del copón bendito. Un sueldo que crece en progresión aritmética mientras que las cañas suben en geométrica.

Y te sientes como un merluzo, y recitas con Sabina lo de ¿Quién me ha robado el mes de Abril?

¿Cuántos Abriles de cuantos merluzos debe costar un Porsche Tuareg?

Anónimo said...

Lo malo de la gente es que come, aunque sea spaguetis, a diario, pero come, en todas las empresas del mundo ocurre lo que te sucede a ti con los compañeros.

Hablas de un "programa", los programas se ven o se escuchan, los oyentes o televidentes, a lo mejor comen por otro lado y no tienen miedo de ir al juzgado a contar que te vieron en tal programa. Es una posibilidad, pídeselo a ellos/nosotros (a lo mejor te vi o escuché, no lo se).

De todos modos el tío es gilipollas, si te da una carta de despido está reconociendo que trabajabas para él, tómatelo con calma que creo que ese juicio lo tienes ganado.

Mendigo, yo soy albañil y lo que cuentas no es real del todo, pero sería largo de explicar (un obrero de la construcción es también un peón y ganan poco), en todo caso si que os sirve de ejemplo, lo nuestro nos ha costado a lo largo de la historia sangre (mucha), sudor (litros) y lagrimas (demasiadas). El caso es que por lo que veo, sobran universitarios en todas las ramas, los hay a patadas, sin embargo faltan obreros cualificados: albañiles, fontaneros, electricistas, encofradores, etc. etc. etc. Decía mi abuela que el que sabe trabajar con sus manos nunca pasa hambre y puede ser verdad. En todo caso los periódicos están llenos de anuncios pidiendo peones para la construcción y para peón sirve cualquiera que esté medianamente en buena forma física, eso si, prepárate para pasar las de Caín, lo de oficial de primera no es gratis y a eso no llega ni el veinte por ciento de los que empiezan.

Tengo colegas con hijos estudiando "Ciencias del Mar" cuando me lo cuentan me pregunto para que va a querer alguien un licenciado en eso, joder, lo que hacen falta ahora mismo son fontaneros y encofradores.

Y otra cosa, si no permitis que os exploten los explotadores no tendrán mano de obra y... tendrán que comenzar a pagaros como dios manda (bueno, más o menos, que nunca pagan lo suficiente).

Felicitaciones a la autora, en mi súpina ignorancia creo que tienes un blog muy bueno, te encontré hace poco y por aquí me paso a diario, aunque no comente nada.

Un vigués.

Eifonso Lagares said...

Desesperada, es una putada lo que te están haciendo. No te rindas lucha hasta el final, tienes todas las de ganar.
Sabes que son métodos habituales en el sector.
El compañerismo en la profesión periodística, y voy a escribir de más, brilla por su ausencia.
Compañeros de verdad se cuentan con los dedos de la mano.
Sabes donde encontrarme para lo que quieras.
Besos, cuídate, no te amargues y lucha.

Mendiño said...

Donicela...bonito alcume.

Para mí quisiera el convenio de la construcción. Y sé de lo que hablo, que me toca muy de cerca.

Lo malo de peón es que como comentas, se puede meter cualquiera. Pero un fresador, un soldador, un palista...los hay con cuentagotas. Ya te puede tratar bien el jefe o lo deja tirao y se jode vivo para encontrar otro.

Así lo que ganan, de 200 talegos en adelante.

winfried said...

Desee, lamento lo que acabo de leer, Wow se me vino el alma al suelo, yo te quiero decir que no estas sola, que tienes muchos amigos, en este blog y afuera, que estamos pendientes que todo te salga bien. Ve con este caso viento en popa, que si hay una persona ganadora en esta vida eres tu!!

Pa lante y ganale al huevon ese!!!!

Desde el otro lado del charco, estoy contigo!

Recuerda TU VALES MUCHO!!!!!!

ekilore said...

¿Tus compañeros cobran entre 500 y 600 euros al mes? Pero si cobrarían más en un burger king...

No es bueno aferrarse a un trabajo por miedo a perderlo, de eso se aprovechan los empresarios. Trabajos basura hay a patadas, desgraciadamente.

Mucha suerte con tu denuncia, cariño, ya nos irás contando!

Marta G.Brea said...

Des, sabes que puedes contar conmigo para lo que sea. Me alegro que lo denunciaras. Tienes todas las de ganar. Yo debería haberlo hecho una vez, y por cobardía o por no meterme en líos no lo hice, y ahora me arrepiento muchísimo.

Me jode que personas tan preparadas y profesionales como tú tenga que pasar por esto. ¡DIOS CUÁNTO ME JODE! Vales muchísimo, Des, y todos los que te conocemos lo sabemos.

BESOS, UN MILLÓN DE BESOS.

Anónimo said...

Des: yo tuvo que ir a juicio una vez por despido improcedente. Pensé que mi relación con los demás compañeros de trabajo no podía ser mejor... Pues en el momento de llamarles a declarar, sólo aceptó una persona.
Creo que ese día empecé a ser "adulta" de verdad, desafortunadamente.

Sé cómo te sientes y, aunque no te sirva de nada, empatizo plenamente contigo.

Un beso enorme.

Meri said...

Cuanto daño hizo la generación de la langosta en nuestro país.

Alguien dijo que el mundo no anda mal por la maldad de los malos, sino por la apatía de los buenos.

En el fondo toda la precariedad laboral que sufrimos la merecemos por no haber peleado nuestros derechos.

Deses..mucho ánimo y a por todas! Merece la pena luchar!

Un besote enorme!!

tootels said...

...y venga.. a tragar... y dale.. a seguir tragando, con el pie en el cuello... esos compañeros que te dicen ¿lo entiendes?, no soy yo quién debería juzgarles, pero dejan bastante que desear...
Con respecto a lo tu despido y lo del juicio, palante!!, ánimo y fuerza.. y no estás sola, sabes que desde cualquier parte se puede hacer la fuerza suficiente, lo único que hay que hacer es vencer la pereza y seguir lo que es correcto.
P.d._ tus "ex-colaboradores", una pandilla de mierdecillas.
P.d.2_ tu jefe, ese nuevo rico, una vergüenza de ser.
Un besino niña ( y abrazos pal wilde de vuelta)

Anónimo said...

Vale, olvida mi mail, ya tienes bastante pa romperte la cabeza conmigo. No puedo ayudarte, pero apoyo moral, todo el del mundo y más. Y sino recuerda a las pigwomen. Aunque sea para hacer bulto y que no te sientas sola, llámame, vale.

Mariano Zurdo said...

Que la rabia se convierta en energía.
Te deseo mucha fuerza y mucha suerte.
No te puedo ayudar de otra forma.
Bicos.

Isabel Burriel said...

No Deses, no eres una utópica.Hay que luchar por esas cosas y denunciarlas. Gracias a dios, y espero que este sea tu caso, estas situaciones suelen amparar al trabajador.
Cualquier cosa que pueda demostrar que tú has trabajado para este señor dejará claro que teníais una relación laboral aunque no hubiera nada escrito.
Ojalá hijoputas como este fueran más a menudo denunciados. Ojalá se le caiga el pelo y te tenga que dar todo lo que la ley imponga.
Ojalá, de veras.

Besos

Pablo González said...

Hola, Deses.

A mí me pasó exactamente lo mismo. El día del juicio, no sólo no tenía ningún compañero a mi lado si no que además había uno de parte del empresario. La descripción que haces de tu jefe es perfecta, porque abarca al 99% de los empresarios gallegos (sólo he trabajado en Galicia, así que no puedo opinar del resto).

El siguiente paso es darse cuenta de que no solo él no ha trabajado en su vida, si no que su padre, el "fundador", tampoco lo ha hecho. El dinero se hizo en una dictadura (ésa que no condenan los defensores del libre mercado).

El juicio lo tienes ganado, como la mayoría de los laborales. Mi consejo: denuncialo en el tiempo que tarda en salir el juicio laboral por amenazas. Él te denunciará por robo (conozco una chica a la que llegaron a denunciarla por robar papel higiénico) para justificar el despido y la mala relación que hay entre ambos. En los juzgados, quien denuncia primero, gana. Y las amenazas no son nunca públicas. A mi hermano llegaron a perseguirle en coche por plena Gran Vía, en plan película, para echarle a la mediana. Olvídate del término empresario. Es un mafioso y no dudará en actuar como tal.

Es una carrera de larga duración y tú la tienes ganada, si aguantas. Muchísimo ánimo y para lo que necesites, ya sabes que compartimos "concello".

Pd. hay tres sitios por donde todos vamos a pasar: el hospital, el cementerio y el juzgado. Por muy sano que estés.

Anónimo said...

de que empresa se trata

Kerouac Riot said...

Después de 25 años me he dado cuenta de que es imprescindible creer en la gente, no se puede vivir en una desconfianza continua ,pero cuidado, siempre hasta cierto punto. A mi me hicieron firmar un finiquito en blanco con tan solo 17 años, cobrando 600 euros todo incluido, expuesto a un trato vejatorio y despreciante las ocho horas del día. Era mi primer empleo. En esa ocasión me sacó mi padre del apuro dándoles una lección magistral de derecho en una citada reunión entre mi padre, yo, mi jefe y su gestor. Cedieron y pagaron. El que me filtraba toda la información era un compañero (hacia 1 mes que lo conocía) barriobajero y macarra, que resultó ser una persona honrada. No me lo esperaba y esa sorpresa fue muy grata. Desesperada, quizás existe menos gente de esta índole para que cuando aparezcan se valore más, pero lo que es bien cierto es que no debes preocuparte ni decepcionarte de los que no son así, el problema es de ellos, no permites que te contamine a ti ese miedo que llevan dentro. Gandhi decía “No debemos perder la fe en la humanidad que es como el océano: no se ensucia porque algunas de sus gotas estén sucias”. ¡¡Ánimo y al ruedo deses!!.

Desesperada said...

Bueno, ante todo mil gracias, me han reconfortado muchísimo vuestros comentarios, tanto por el apoyo como por el consejo.

no quiero decir aquí el nombre del medio, pero quien quiera saberlo que me envíe un correo, le responderé encantada.

la cuestión es que ese medio CIERRA, bueno, seguramente no cerrará porque este señor untará a alguien para seguir emitiendo, pero legalmente no puede. es decir, mis ex compañeros saben que se van a ir a la calle sí o sí. por eso no comprendo que tengan miedo. sólo UNA persona me ha llamado ofreciéndose. me parece patético, qué queréis. sé que, como dice donatela, das una patada y aparecen cien periodistas, pero os garantizo que periodistas cualificados no. mi profesión está tan precarizada que el nivel es bajísimo. vamos, ¡tenéis que notarlo al leer periódicos, escuchar la radio o ver la televisión! y mientras nosotros mismos no entendamos que tenemos que plantar cara a los empresarios para defender nuestra profesión, mal vamos.

Lucía said...

Yo hoy estoy tan de mal humor con mi empresario de turno, que prefiero no pronunciarme para no decir alguna burrada de las gordas.

Suerte en el juicio Des. Tú no te rindas y ya verás como se acaba demostrando la verdad.

Caminante 2.10 said...

Leyendote.... me estaba sitntiendo indignado porque algo parecido pocurre en la hosteleria. Desde luego mucho animo y suerte!!!!

Esta claro que hay gente que tiene el orto muy ancho para meterse todos sus principios cuando les hace falta... que pais!!!

Reparito 2.07

Kurtz said...

Desde aquí te brindo todo mi apoyo y solidaridad.
No dudes de que si yo hubiera sido uno de tus compañeros sí que hubiese declarado.
Muchos bicos y ánimos.

miriño said...

Tus compañeros de trabajo no son tus amigos. Esto es una máxima a tener en cuenta siempre.

Siempre he dicho que los culpables directos de la situación laboral suelen ser los propios trabajadores, los que siempre tienen miedo de perder algo.

Siento que hayas tenido que pasar por esa experiencia, pero te animo a seguir luchando. Alguien tiene que hacerlo. Y sólo lo hacen los que tienen más valor. Te ha tocado ser valiente.

Y ya sé que no tiene sentido que ante una empresa que cierra los trabajadores se echen para atrás, pero sus razones solo ellos lo saben. Apóyate en esa persona que se ha ofrecido y olvídate de los demás.

Ánimo, mucho ánimo...

Desesperada said...

Miriño, sé que los compañeros no son amigos... bueno, una persona de ese medio pensaba que sí lo era. han sido cuatro años de relación fuera del trabajo, ya sabes que siempre hay alguien con quien congenias. y el rechazo de esa persona a ser testigo es el que más me ha dolido, porque para mí siempre estaría antes un amigo que un trabajo de mierda como ese. pero... la culpa es mía por pensar que el resto de la gente es tan objetiva como lo soy yo. en fin, gracias por el apoyo a todos, de verdad, me siento muchísimo mejor, aunque parezca absurdo. no nos conocemos, y sin embargo apostaría a que muchos de vosotros sí testificaríais a mi favor, y yo al vuestro, desde luego, si se diera el caso. bicos.

Anónimo said...

Estoy con quien ha dicho arriba que trabajos basura los hay a patadas. En el momento en que asumes eso y que tu dignidad no depende de hacer un trabajo con un determinado nombre o titulación sino bajo unas determinadas condiciones, ganas en libertad y en tranquilidad.
Ánimo. Si te valgo, estoy dispuesta a cometer perjurio. ;-)

Guillermo Pardo said...

Tremenda historia, Deses. Tu franqueza me abruma y me acerca más a ti. No sé qué decir. No encuentro palabras adecuadas que no suenen repetitivas ni huecas. Lo siento, francamente, y si crees que puedo hacer algo por ayudarme, no dudes en llamarme o en escribirme. No lo dudes.
Aprovecho para decirte que, si me das permiso, mañana copio íntegramente el texto de tu post y lo pego en mi blog. Tu historia lleva tu nombre, pero también el de otros muchos miles y creo que debe difundirse para despertar conciencias. Unha aperta con cariño y amistad.

Marcos said...

Ante todo quisiera comunicarte mi más profundo pesar por encontrarte en la situación que te encuentras.

Es evidente, querida Desesperada, que no se pude confiar en nadie. No ahora, no. Nunca se ha podido confiar en nadie por un simple motivo: Los humanos, generalmente, somos muy malos. Lo más importante somos nosotros, luego nosotros y despúes nosotros. Y si queda algo... también para nosotros. A los demás que les den por el culo.

Podemos estar viendo como asesinan a alguien. Tranquila, nadie se acercará para echar un cable. No vaya a ser que también caiga.

Un beso... solo para tí.

Anónimo said...

Con el dinero has topado... ayer precisamente lo hablaba con una amiga, toda la vida diciendonos que hay que ser buenos y llegas a adulto y tienes que ser un miserable para vivir... hipocritas de mierda.

Desesperada said...

ohnenick, ¡gracias! si necesito perjuros te llamaré sin dudarlo: sólo con que testifiques la mitad de bien que cuentas HC tengo el temita ganado!!!

guillermo, claro que puedes colgar el texto. sé que hay muchas personas en mi situación, y de hecho fue ese uno de los motivos que me animó a denunciar: que mi sentencia, si es favorable, cree jurisprudencia, porque en Galicia no la hay.

Marquiños, gracias, un beso. pero no creo que todo el mundo sea malo, sólo la inmensa mayoría, je je je

estilografic.blog said...

Deses: tu aventura es un reflejo de lo mal que está la profesión periodística. Yo llevo meses tratando de cambiar de trabajo, y no es sólo que haya pocas ofertas, sino que además las que hay son de risa: horarios interminables y sueldos ridículos. Si de algo te puede servir mi apoyo como periodista, cuenta con él para lo que necesites.

Vamos a tener que organizar algo entre todos los blogueros que nos conocemos y montarnos un medio de comunicación propio y a nuestra manera.

Besos y suerte, compa.

Desesperada said...

estili, no me parece mala idea, no te creas. yo estoy muchíiiisimo más informada desde que leo tantos blogs que cuando sólo leía prensa, será por algo.

Blasfuemia said...

Me apunto a "perjuriar" lo que haga falta, por supuesto.

No sé si alegrarme por ver que no soy la única gilipollas (es broooma). Creo que ya te lo dije cuando mencionaste este tema, que a veces se pierde para ganar. Estás llamada a cosas mejores. Seguro. Vamos, que de convencida que estoy me compraría acciones por-desesperada.

El miedo es libre, pero hay miedo que te produce verguenza ajena. Las cosas serán así, pero no significa que deban de continuar así. De todas formas, si de algo estoy convencida y además es impepinables es de que el tiempo da y quita razones y pone a cada uno en su lugar.

dousmars said...

Lo siento por la impotencia que provocan estas situaciones, quizás no es la injusticia, sino el sentimiento de indefensión e impotencia ante esa persona.Centra tu energía ( que intuyo que la posees)en la lucha, y piensa que: " hay más días que longanizas", verás cuando se acaben las longanizas en tu trabajo.Además yo al igual que Casandra veo más allá, y te pronóstico que es lo mejor que te pudo pasar. Así estarás libre para poder encontrar un trabajo gratificante, pareces muy luchadora y trabajadora. De lo que pagan los medios, no quiero hablar, mucha gente trabaja sin remuneración económica, y tengo pruebas.Así que ánimo.Hoy es un buen día plantéatelo así. Nace una nueva deses.

Mucho ánimo y a por ellos, son pocos y cobardes.

ekilore said...

Como dice blasfuemia, el miedo es libre, pero hay miedo que te produce verguenza ajena...

Anónimo said...

No lo había leído, lo siento mucho...

recibe un abrazo

Jove Kovic said...

Hola Des, espero que todo te vaya bien. Si necesitas cualquier cosa, me llamas o me escribes o lo que sea. No lo dudes.
Tienes toda la razón del mundo, el miedo es el gran motor de la vida. La gente se aferra a mierdas como la que describes, porque todavía tenemos la tontería en la cabeza de pensar que la dignidad está en el trabajo y no en el trabajador. Así están las cosas, y es una auténtica mierda. Suerte y ánimo.

winfried said...

Cono Desee, Si estuviera en Espana ya los hubiera llamado como 500 veces jodiendo al senor ese, tu sabes que pa sacar la piedra no me canso..

Atacalo sin misericordia y danos ese gusto a todos nosotros!!

Hum, a lo mejor no es mala idea, los llamo desde skype y les hablo in Ingles, ...que querra el Gringo este que llama tanto...

Tan solo me dices...

Desesperada said...

gracias de nuevo, chicos. me basta con vuestro apoyo, winfried, no es necesario que los machaques con tu acento yanqui, ja ja ja ja, biquiños!

entrenomadas said...

Acabo de leer tu post, y sabes esto me suena, aquí también pasa, en mi tierra.
Es una pena que gente tan valiosa como tú, sólo hay que echar un vistazo a tu blog para darse cuenta, tenga a semejantes sinvergüenzas como jefes o ex-jefes ya.


En fin, un beso, o mejor dos besos,

Entrenómadas

Fran Invernoz said...

Me solidarizo contigo, acabo de enterarme de tu situaci'on, que te voy a contar, que conozco otros casos como el tuyo. Me solidarizo contigo y no se en que medida puedo ayudarte,pero estoy a tu disposicion.

leo said...

He llegado muy tarde, pero no quería dejar de mandarte un besote grande y todo mi ánimo en esta lucha.
Una vez que nos libramos del miedo todo va mejor. Así que no dudo que saldrás bien parada de esto. Fortalecida, seguro.
Las personas que, como tú, lucháis por vuestra dignidad nos animáis al resto a valorarnos más y a no escondernos.
Lo dicho: un abrazo grande.

Anónimo said...

A por ellos..

Maria said...

¡A por ellos! Ojalá ganes. Por ti, lo primero, pero tambien para acabar con la maldita corrupción responsable de estas situaciones. Y ojalá tambien que se vea publicado en los medios y haga un ruido del caralho.

Maria said...

¡A por ellos! Ojalá ganes. Por ti, lo primero, pero tambien para acabar con la maldita corrupción responsable de estas situaciones. Y ojalá tambien que se vea publicado en los medios y haga un ruido del caralho.

Anónimo said...

Si vas a juicio será un poco largo, pero ganarás. Ayer salió una noticia sobre un tipo al que tienen que pagar 60mil euros por las horas extras no remuneradas, así que denuncia y habla con algún sindicato (evita Comisiones y UGT, que la misma mierda es) Ánimo!

Anónimo said...

Todos hemos tenido "compañeros" así alguna vez, y aún peores. Hace unos cuantos años en una obra hubo un accidente, con un peón muerto y todo, un accidente muy completo (con patrón incluido que te berreaba si le pedías un casco, así que un arnés ya no digamos y capataz que te llamaba maricón si te ponías guantes para mover materiales o cosas así). La viuda y la madre del finado reclamaban justicia (que en estos casos consiste en una indemnización) a partir de ahí descubrimos todos que el empresario no estaba cotizando por nosotros y alguna irregularidad más ¿te puedes creer que solo dos nos fuimos de la empresa y testificamos a favor de la viuda? ¿a que es increíble? pues no termina ahí la cosa, El capataz por el que tampoco cotizaba ni cotizó nunca, ya mayor fue de testigo para el patrón alegando que había habido negligencia por parte del muerto, lo malo es que les salió el tiro por la culata, los picoletos se habían portado e hilado muy fino en el atestado y las declaraciones y con nuestra declaración y todo eso la sentencia salió favorable a la viuda y el cantero acusado de perjurio (y encima yo le llamé idiota e hijo de la gran puta y le iba a meter un hostión pero me sujetó el policía del juzgado mientras decía "aquí no, por favor"). Un tiempo después salió el juicio mio y el del colega por haber currado sin estar dados de alta en la SS, no hubo compañeros tampoco a favor nuestro (los compañeros seguían currando para el botarate ese sin cotizar ni nada, en régimen de semiesclavitud) y el cantero se cagó para ir a favor del jefe, el tío negó que hubiesemos trabajado nunca para él pero... estaba el atestado de la guardia civil de cuando el accidente, donde explicaba con pelos y señales que tanto el colega como yo estábamos trabajando en esa obra y lo que hacíamos, aún así el tío siguió negando que trabajásemos allí, y aquí viene lo más gracioso: el juez le pregunta al paisano que pintábamos nosotros en la obra y declarando sobre el accidente si no trabajábamos en ella y el tipo responde "no se, pasarían por allí, en las obras siempre hay gente curioseando", entonces el juez le dice al secretario (bueno, un tipo que había allí, supongo que sería secretario) que tomase nota, que se pospondría el juicio para nueva fecha y citaría a declarar a los guardias civiles que habían hecho el atestado, el juez mira para el empresario y le dice "vamos a hacer eso y usted tenga en cuenta que en los juicios declara bajo juramento, si estos hombres trabajaban para usted se le va a caer el pelo" (más o menos fue la frase que dijo), el tío se viene abajo y suelta por aquella boca de piñón: "bueno, trabajaban pero poco y mal, por eso digo que no trabajaban" hasta al juez le costó aguantar la risa. Por esto al tío no le pasó nada grave, solo tubo que pagar el tiempo que no había cotizado por nosotros (en mi caso dos años y medio y en el del colega tres).

Dios castiga sin palo y sin piedra, el cabrón de empresario se mató poco después de un sopapo con el coche, no dejó ni mujer ni hijos, supongo que salvo el capataz (que le falta un hervor, todo hay que decirlo) no había quien lo quisiera.

Así que ya ves, compañeros como los tuyos sobran, hay a patadas. Y no te quejes mucho, que otros tendrás que buenos los harán.

Desesperada said...

donicela, me parece terrible la historia que has contado. terrible. pero por desgracia, en este puto país, hasta corriente. es que no entendemos que mientras sigamos tragando nos van a dar por culo cada día!!!!!

gracias a todos los que habéis seguido entrando a dejarme un mensaje de apoyo. es alucinante que esta sea mi entrada con más comentarios, es enormemente reconfortante. este pequeño gran mundo que es la blogosfera puede cambiarlo todo!

Fran Invernoz said...

Vuelvo a escribirte para comentarte la mala situación en que se encuentra la profesión (no sé si se puede llamar así del periodista). Te voy a contar que en Avilés, la tercera ciudad de Asturias con algo más de 80.000 habitantes) conocí el caso de un fotógrafo, José Ángel Galarraga, que estuvo trabajando sin estar asegurado en la delegación de Avilés de La Nueva España, un diario con sede central en Asturias en Oviedo. Pues este redactor gráfico fue a juicio y la empresa presentó como testigo al responsable de la delegación de Avilés, Gonzalo Peón, que negó conocer a Galarraga. En el juicio, me contó otro fotógrafo, Miki López, que fue como testigo de Galarraga, que el juez sonrío y le pregunó a Peón, ¿pero cómo es que usted no conoce a este señor si publicaba una media de 50 fotos diarias a lo largo de ocho años?. Bueno, el fotógrafo ganó el juicio y cobróa la indemnización correspondiente. Se presentó a unas oposiciones y ahora es funcionario. Gonzalo Peón, después del juicio, fue ascendido y trasladado desde Avilés a la capital asturiana, Oviedo, con aumento de sueldo y ascenso en la categoría. Conozco los casos de inmigrantes que trabajan como periodistas, pero ni te cuento. Estoy de acuerdo con el mendigo, hay que sindicarse, me imagino que debe ser algo así como afiliarte a un sindicato. Sin embargo, las empresas mantienen muy buenas relaciones con la Inspección de Trabajo, te podría contar otro caso pero no quiero agobiarte. Desde Asturias, me ofrezco en lo que pueda ayudarte, tienes mi correo: martinbolivar@hotmail.com

A continuación te invito a que leas con tranquilidad:

un poema de Almafuerte:


No te des por vencido, ni aun vencido,
no te sientas esclavo, ni aun esclavo;
trémulo de pavor, piénsate bravo,
y arremete feroz, ya mal herido.
Ten el tesón del clavo enmohecido
que ya viejo y ruin, vuelve a ser clavo;
no la cobarde estupidez del pavo
que amaina su plumaje al primer ruido.
Procede como Dios que nunca llora;
o como Lucifer, que nunca reza;
o como el robledal, cuya grandeza
necesita del agua y no la implora...
Que muerda y vocifere vengadora,
ya rodando en el polvo, tu cabeza!

También te envío la

DESIDERATA

(Desiderata = palabra latina que significa "cosas que se desean")

De Max Ehrman (1872-1945)


Ve plácidamente entre el ruido y la prisa, recuerda que la paz puede estar en el silencio. Sin renunciar a ti mismo, esfuérzate por ser amigo de todos. Di tu verdad, quietamente, claramente. Escucha a los otros aunque sean torpes e ignorantes; cada uno de ellos tiene también una vida que contar.
Evita a los ruidosos y agresivos, porque ellos denigran el espíritu. Si te comparas con los otros puedes convertirte en un hombre vano y amargado; siempre habrá cerca de ti alguien mejor o peor que tú.

Alégrate tanto de tus realizaciones como de tus proyectos. Ama tu trabajo aunque sea humilde; es el tesoro de tu vida. Vive en paz con Dios, no importa cómo lo imagines; sin olvidar tus trabajos y aspiraciones, mantente en paz con tu alma, pese a la ruidosa confusión de la vida.
Pese a sus falsedades, penosas luchas y sueños arruinados, la Tierra sigue siendo hermosa. Sé cuidadoso. Lucha por ser feliz.

entrenomadas said...

Amiga, en nuestro blog hemos difundido tu historia y enseguida han llegado comentarios entre la indignación y la solidaridad. Ánimo.
Muchos besos desde Aragón.

Anónimo said...

Hola, no sé si leerás este comentario por tardío. En cualquier caso no podía dejarlo pasar ya que comparto experiencia y profesión. Me pasó lo mismo aunque por motivos distintos. Dudé mucho si ir a juicio. Al final gané. Es muy injusto, lo sé. Pero más que eso, duele ver la poca solidaridad que existe cuando estás con la soga al cuello.
Quedarse quieto es lo último que se debe hacer. Suerte, ánimo, tienes las de ganar. Y perdona por meterme aquí después de un largo, larguísimo silencio.
Claudia

Desesperada said...

Hola Claudia. Muchísimas gracias por tu comentario y tus ánimos. Reconfortan, aunque no nos conozcamos. Bicos.